1. Las mellizas cambian de colegio.
A Pat e Isabel O'Sullivan les disgusta la idea de ir a Santa Clara: querían ir a la Escuela Ringmere con sus amigas y rechazan todo lo relacionado con el cambio.
Pero pronto se instalarán allí y conocerán nuevas compañeras, vivirán experiencias inolvidables, y se enfrentarán a toda clase de imprevistos. ¿Cambiarán de idea?
2. Las mellizas O' Sullivan.
En este nuevo trimestre se une a ellas su prima Alison, una niña presumida y mimada a la que no le resultará nada fácil adaptarse al internado.
Comienza un nuevo trimestre en Santa Clara, y las mellizas Pat e Isabel O'Sullivan continúan con sus vivencias en el primer grado de esta escuela, junto a sus viejas amigas y también junto a algunas nuevas alumnas, con las que no siempre lograrán llevarse bien.
3. Las mellizas en Santa Clara.
Las mellizas Pat e Isabel O’Sullivan esperan con ilusión el inicio del curso de verano, pero sufren un contratiempo inesperado.
A pesar de todo, reciben una afectuosa bienvenida de sus compañeras y conocen a seis nuevas chicas que se unen a su curso, todas ellas con caracteres dispares.
4. Segundo grado en Santa Clara.
El segundo curso comienza en Santa Clara con algunas novedades que no todas aceptan de buena gana: dos nuevas compañeras y el nombramiento de dos jefas de clase poco populares.
Mientras que las nuevas descubrirán que la amistad les ayuda a resolver sus problemas, las jefas de clase acabarán revelando lo mejor de una y lo peor de la otra.
5. Claudina en Santa Clara.
No sólo la llegada de una estricta ama a Santa Clara pondrá las cosas difíciles a las alumnas de cuarto grado.
También las ideas y el comportamiento caprichoso de Claudina, una nueva alumna llegada de Francia, que más tarde resultará ser una alegre y buena compañera, acabarán poniendo a prueba a todo el curso en más de una ocasión.
6. Quinto grado en Santa Clara.
Un curso repleto de divertidos malentendidos y anécdotas inolvidables.
En Santa Clara, las alumnas de quinto grado tendrán que aprender a convivir con sus compañeras y deberán asumir las responsabilidades que supone ser las mayores del internado. Sus privilegios crearán, en algunos casos, situaciones difíciles con las alumnas de grados inferiores.
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